Hace unos años que la electroestimulación se ha puesto de moda dentro de los deportistas. Mitos y leyendas rodean a este aparato de fitness. No en vano la electricidad es la base de este dispositivo y, por lo tanto, muchas creencias han sido infundadas acerca de esta técnica.Uno de los más escuchados es que si usamos este tipo de máquinas conseguiremos una mejora en el desarrollo muscular sin necesidad de realizar ningún tipo de entrenamiento.
Por ello, vamos a aclarar las posibles dudas que pueden surgirte a la hora de comprar un electroestimulador.
Como ya hemos sugerido, en el deporte (como en muchas otras actividades) no existen milagros. Y los resultados solo se alcanzan con esfuerzo y trabajo diario. Por ello es fundamental que olvides la idea de que los electroestimuladores es la nueva panacea.
Es cierto que representan una ayuda a la hora de progresar, pero como elemento complementario.
Los electroestimuladores siempre han sido usados para recuperarse después de una lesión. Por ello es una máquina aplicada habitualmente por fisioterapeutas y traumatólogos.El primer uso por el que fueron diseñados era para estimular los músculos después de un periodo de inactividad. Más tarde se ampliaron estos usos dándole una utilidad mayor para conseguir un desarrollo muscular mejor y más rápido.
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Beneficios
Es imprescindible conocer sus beneficios para no engañarse ni por exceso ni por defecto.
Los electroestimuladores nos ayudan a conseguir una mayor activación muscular y una mejor contracción de las fibras. Alcanzaremos zonas musculares que no alcanzaremos con una contracción voluntaria.
Es un ejercicio pasivo por lo que el sistema nervioso no recibe una alta fatiga. Así se consigue un número de repeticiones mayor y dispondremos de más aguante. Con lo que es un extra muy sustancioso para nuestros ejercicios diarios. Así se saca mucho más partido a nuestras horas de entrenamiento.
Inconvenientes
Como principal inconveniente (es por lo que muchas personas comentan que han sido engañadas) es que solamente con un electroestimulador no se consigue un completo desarrollo muscular. La electroestimulación nos ayuda a entrenar en profundidad los músculos y a acelerar el desarrollo muscular, pero el ejercicio regular nos ayudará a ganar más volumen.
Por ello como ya hemos dicho antes, la electroestimulación se debe usar como complemento, nunca como sustitutivo.
Trabajar con estimuladores no mejora el control muscular ni la coordinación, puesto que los movimientos no son controlados por nosotros. Además encontramos una falta enorme de trabajo cardíaco, ya que el corazón y los pulmones trabajan mínimamente.
Al realizar solo un trabajo muscular no se fortalecerán tendones ni articulaciones, debilitándose poco a poco y aumentando el riesgo de lesionarnos.
Algunos mitos
Un mito es una historia que se le ha dado más credibilidad de la que en verdad tiene. Por lo tanto dudamos si es del todo real o no.
Respecto a los electroestimuladores los mitos siempre han estado presentes. Siendo algunos bastante racionales y otros, por el contrario, un completo sin sentido.
Por ello a continuación vamos a aclarar algunos de estos mitos y ver cuántos son verdad.
Con usar la electroestimulación vale
Creer que te vas a poner en forma en el sofá de tu casa simplemente conectado en electroestimulador…es un gran error.
El mayor mito de este dispositivo es que se dice que no hace falta un trabajo complementario.
Sí que es verdad que estarás recibiendo un estímulo bastante fuerte. Así que sin duda alguna estarás quemando calorías.
No obstante hay que acompañarlo de movimiento muscular para lograr su completa efectividad.
Cualquier persona puede usarlo sin tener en cuenta su fisionomía
Esto sí que es verdad pero con ciertos puntos a tener en cuenta. Como principio básico y fundamental, cualquier persona que se someta a una intensidad de trabajo debe de presentar unas características físicas acordes.
Con esto se evitarán lesiones o diversos problemas de salud.
También es recomendable mantenerse bien hidratado. Este tipo de sesiones mueven mucho los músculo y se aumenta su desgaste.
Perderás peso
Usando un electroestimulador por sí solo no perderás peso. Debes de acompañarlo con una buena alimentación, de esta manera perderás esos kilogramos previstos.
Para todo el mundo
Como es habitual, es necesario no tener ninguna de las siguientes patologías o enfermedades: personas que padecen epilepsia, problemas de tendinitis, inflamación, con tumores, implantes activos, patologías o las mujeres embarazadas.
Conclusiones
Como habréis leído, un electroestimulador cumple su función perfectamente, es culpa nuestra no seguir una serie de indicaciones para su correcto uso.
Fundamental compaginarlo con un ejercicio físico con el que trabajar los músculo. Y, sobre todo, ante cualquier duda que pueda poner en peligro nuestra salud preguntar a un médico o persona cualificada sobre cómo usar esta máquina.
